Ana Alberca
Primitivo, abstracto, impulsivo, equilibrado, son palabras que pueden explicar tanto el proceso de creación como el resultado final reflejado en la obra gráfica de Ana Alberca. En su trabajo las líneas tienen un papel protagonista. Es un elemento sencillo que le permite crear imágenes que pueden llegar a transmitir diferentes sensaciones, desde el sosiego a la agitación, dependiendo de la contundencia y la forma del trazo.
Sus grabados tienen cierta conexión con el "tachismo" español surgido en 1950 en cuanto a la abstracción de las formas que representan. Ana Alberca trabaja con planchas de cobre y zinc usando la técnica de la punta seca, una aguja afilada que incide directamente sobre ellas de forma enérgica, dibujando líneas y describiendo ritmos ondulantes que se convierten en formas de caligrafía o en nerviosos y reiterativos trazos
La pureza de los trazos confieren a su obra un fuerte impacto minimalista. La sencillez está tan presente en su obra, que a pesar de mostrar solo unos pocos elementos, éstos están dotados de una enorme expresividad y no requieren de ninguna forma adicional para completarse.